Ciudad de México. El gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador anunció que reducirá la carga fiscal a Petróleos Mexicanos (Pemex), como parte del fortalecimiento a la empresa que será de 107 mil millones de pesos para este año.
En la conferencia de prensa que encabezó el mandatario, para presentar el plan de ayuda para la empresa productiva del Estado se informó que se hará una reducción de la carga fiscal por 15 mil millones de pesos, la cual se aplicará cada año para que en 2024 el acumulado sume 90 mil millones de pesos cada año, además de que ya no se contratará más deuda.
López Obrador reiteró que durante el periodo neoliberal Pemex fue saqueada y parte de ese andamiaje fue la reforma energética, que, afirmó, fue “un rotundo fracaso con todas estas instancias reguladoras supuestamente independientes cuando de estaban al servicio estas intermediarias”.
El Presidente indicó que Pemex tiene todo el respaldo del gobierno, por lo que se irá evaluando si la petrolera mexicana necesita más recursos.
En su intervención Alberto Velázquez García, director de Finanzas de Pemex, explicó que se hará un prepago de 325 millones de pesos por parte de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público.
Indicó que el gobierno federal incrementa el monto del incentivo fiscal, el cual representará una disminución de 15 mil millones de pesos, el cual va a ser acumulativo a lo largo del sexenio.
Informó que entre la reducción fiscal, la capitalización de 25 mil millones de pesos y la monetización de pagarés por 35 mil millones de pesos e ingresos por el boyante al robo al combustible por 32 mil millones de pesos, dará el total de 107 mil millones de pesos.
Comentó que en el sexenio pasado contrató deuda nueva por 140 mil millones de pesos, pero ya no se va a contratar más deuda debido a la ayuda que llega a la empresa como parte de la responsabilidad fiscal con la que se prevé bajar el costo de operación y del esfuerzo recaudatorio que tiene el gobierno federal.
Por su parte, Carlos Urzúa, titular de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, reiteró que la reducción de la carga fiscal se hará a través del sexenio y Pemex será respaldado por el gobierno, por lo que si requiere más capital, lo tendrá.
Urzúa indicó que la empresa contrató deuda por alrededor de 3.5 por ciento del PIB, recursos que se destinaron a inversiones, pero indicó que los resultados no se ven por ningún lado porque se perdió por ineficiencia y por corrupción.
El presidente López Obrador indicó que si se acaba la corrupción que hay en Pemex, “va a renacer” la empresa petrolera.
Indicó que se otorgaron contaros a Repsol en Cuenca de Burgos para generar más gas; sin embargo, “no se aumentó la producción y fue un mal negocio para la nación, un jugoso negocio para la empresa, mal negocio para Pemex”.
Indicó que en este caso se trata de inyectarle recursos a Pemex, “quitarle carga fiscal, limpiar a Pemex de corrupción y esto va a permitir a sacar adelante a Pemex”.
El mandatario mexicano indicó que los tecnócratas optaron por la privatización, por lo que son responsables del fracaso de Pemex y ahora dicen que no se va poder rescatar a la empresa, pero dijo aceptar el desafío. “Vamos a sacar a adelante a Pemex, va a ser una empresa de utilidades, y va a tener ganancias”.
Por su parte, Octavio Romero Oropeza, director de Pemex, indicó que ya se están desarrollando los campos nuevos, por lo que a final de ese año se podrá estabilizar la producción de barriles diarios que hasta el momento va en caída, mientras que para 2020 comenzará a incrementarse la extracción del crudo.
Abasto de combustible, casi normalizado
Por otra parte, el presidente López Obrador informó que el abasto de gasolinas está casi normalizado y el robo de hidrocarburos ha bajado 90 por ciento, pero indicó que el próximo 21 de febrero se darán a conocer los resultados del plan que inició el 21 de diciembre.
Agregó que en Jalisco se normalizó hace seis días, mientras que en Querétaro, Guanajuato y Estado de México ya es regular el servicio, en parte porque se han abierto los ductos.