San Luis Potosí, Slp.- Con indignación, consternación y sed de justicia, familiares, amigos y el pueblo vallense, despidió al muralista, Héctor Domínguez, su padre y su hermano, quienes fueron asesinados el pasado viernes.
El ‘último pincelazo’, se vio en las calles de Ciudad Valles con dolor y coraje.
El féretro fue cubierto por una manta con manos pintadas de los seguidores del artista potosino, que hoy exigen el esclarecimiento del triple homicidio, que dejó al descubierto el fallido sistema de seguridad y protección en la entidad.
Héctor Domínguez, sufrió un atentando el pasado mes de septiembre, del cual interpuso una denuncia, que hoy demuestra, no fue atendida.
El muralista Héctor Domínguez fue asesinado por sujetos armados, quienes entraron a su domicilio en el fraccionamiento Bonifacia Salinas en Ciudad Valles, San Luis Potosí, y abrieron fuego contra él y su familia, la noche del viernes.