Ciudad de México. La economía mexicana se contrajo 0.2 por ciento en los primeros tres meses del año, respecto al último trimestre de 2018. Una caída en los servicios y en la industria explicaron el revés, de acuerdo con el reporte del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
Los servicios y la industria cayeron 0.2 y 0.6 por ciento, respectivamente; mientras la agricultura, pesca y ganadería crecieron 2.6 por ciento, durante el primer trimestre de 2019 respecto al cierre del año pasado.
A tasa anual, el PIB creció 0.2 por ciento en enero y marzo de este año. El resultado es el más bajo para cualquier otro primer inicio de trimestre desde la crisis de 2009.
Cíclicamente, el primer año de toda administración implica una desaceleración, pero el crecimiento reportado en el arranque de este sexenio es el más bajo para cualquier inicio de gobierno, de acuerdo con la estimación oportuna del organismo.
El 0.2 por ciento de avance para el producto interno bruto (PIB) reportado esta mañana se compara con un crecimiento de 2.73 por ciento al inicio de 2013, de 2.24 por ciento en el arranque de 2007 y de 1.85 en 2001, arranques de los pasados sexenios.
La industria arrastró el crecimiento. A tasa anual esta actividad cayó 2.1 por ciento. En contraparte la agricultura, pesca y ganadería aumentaron 5.6 por ciento, y los servicios lo hicieron en 1 por ciento.
El resultado incluso se quedó por debajo del consenso de especialistas consultados por el Banco de México, que en su encuesta de marzo, apuntó que la economía crecería 1.38 por ciento a tasa anual en el primer cuarto del año.
La víspera, la calificadora de riesgo HR Ratings alertó de “un panorama poco alentador para la economía». Expuso que los resultados del Indicador Global de la Actividad Económica (IGAE) al mes de febrero apuntaban a un mejor resultado respecto al primer trimestre de 2017, pero a caída respecto al cuarto trimestre de 2018. Al final, ambas fueron caídas.