Lisboa.- Más de un millar de bomberos luchaban el lunes por tercer día consecutivo contra un gran incendio forestal en el centro de Portugal que ya ha dejado 31 heridos.
En las labores de extinción también se emplearon el lunes 321 vehículos y una aeronave que arroja agua, según la agencia portuguesa de Protección Civil.
Las llamas han avanzado deprisa por los densos bosques del distrito de Castelo Branco, 200 kilómetros (unas 125 millas) al nordeste de Lisboa, la capital.
El descenso de las temperaturas durante la noche ayudó a las agencias de emergencias a ganar terreno, aunque las autoridades dijeron esperar que el calor y el viento crecieran por la tarde. Los bosques están muy secos tras semanas sin apenas lluvia.
Los incendios forestales son habituales en Portugal, donde el pobre mantenimiento de los bosques y el cambio climático hacen vulnerables a los bosques.
Al menos 106 murieron en incendios forestales en 2017, un año que fue especialmente difícil para Portugal.