Envuelto en las llamas del infierno que él mismo creó, Andrés Manuel López Obrador está ‘incendiando’ al país, como lo hiciera el emperador Romano, Nerón que tenía la pretensión de construir una nueva Roma sobre los restos de la ciudad devastada.
Cobijado por un despotismo delirante, López Obrador, emula a Nerón, hasta en la persecuciones que el emperador desató contra los cristianos. Cómo Obrador hoy lo hace contra conservadores y todo aquel que no simpatiza con su gobierno.
Trepado en un tobogán en caída libre, el gobierno de Obrador se ha desplomado vertiginosamente en la aceptación ciudadana, de un 67.1% que fue su pico más alto en febrero de 2019, a un 48.8% en mayo de éste año.
Asustado por esa pérdida del poder ciudadano que que ahora se manifiesta en protestas en las calles como la que se organizó éste sábado en 70 ciudades del país, dónde piden su renuncia.
Obrador y los suyos tratan de desestimar esas expresiones que califican como; ’intentos golpistas’ de los conservadores.
Envuelto en una visión delirante de poder absoluto, se ha empecinado no solo ‘quemar’ o destruir todo lo pasado, sino en confrontar, y atacar a todo aquel que lo critique o que represente una resistencia a su Cuarta Transformación.
Lejos de asumir su papel como Presidente, López Obrador no ha tenido el talento para despojarse de su esencia de líder opositor bravucón y lejos de gobernar, se ha perdido en pleitos intestinos, con gobernadores, empresarios, partidos, científicos, médicos, economistas, burócratas federales y con periodistas a quienes indistintamente ha estigmatizado, como; corruptos ó conservadores.
Cercado por tantos enemigos, pero sobre todo por su incapacidad para gobernar y resolver los problemas de inseguridad, económicos y de salud que van en aumento.
López Obrador, ya no tiene la salida de repartir culpas y existe un creciente reclamo para que asuma su responsabilidad por los 34 mil 600 muertos que deja cada año la violencia y por los 9 mil 779 muertos que han muerto hasta ayer por Covid-19 y por el millón de empleos que se prevé se perderán por la crisis económica.
‘Las llamas’ que el presidente atizó en el país, lo están alcanzando y no sólo a él, si no también a su proyecto de mantener a Morena en el poder pese a que tiene proyectado gastar 5 mil billones de pesos- que es dinero del pueblo- en dádivas para afianzar la estructura Morenista en lo que resta de su gobierno.
Lo grave es que las pavesas del incendio político que ha provocó Obrador, se están esparciendo peligrosamente en todo el país donde las ‘hojas están secas’ por la decepción, alza en la pobreza , pérdidas de empleo y desencanto que ha provocado su gobierno.
No hay que olvidar que el humo siempre avisa cuando el fuego está cerca.
