Ciudad de México.- Cuando parecía que los Tigres se iban a llevar la victoria sobre Cruz Azul y por consecuencia lograrían sin mayor problema su pase a la final de la Copa por México, un gol de último minuto de Igor Lichnovsky empató el partido 1-1 y envió todo a la definición por penales, instancia en la que terminó imponiéndose por 4-3 La Máquina.
La escuadra regiomontana comenzó con el control del balón y tuvo la primera jugada de peligro al minuto 21, con un disparo del francés André-Pierre Gignac, quien en los linderos del área impactó el esférico, el cual se fue por arriba de la portería de Jesús Corona.
Fue al minuto 34 que llegó el gol para los de la Universidad Autónoma de Nuevo León, luego de que se cobrara un tiro de esquina, que midió de buena forma el colombiano Luis Quiñones, para sacar un cabezazo que mandó la pelota al fondo de la red de la portería celeste para poner el 1-0 en el marcador.
Los Tigres no bajaron la intensidad y tuvieron otra oportunidad para ampliar su ventaja, debido a que Gignac sacó un remate que desvió Corona, pero el balón cayó n los pies de Leo Fernández quien disparó hacía la portería, pero el guardameta de la escuadra cementera respondió de nueva cuenta para enviar la jugada a tiro de esquina.
Para el segundo tiempo Cruz Azul intentó responder y a nueve minutos de haber iniciado la parte complementaria el peruano Yoshimar Yotún recibió el balón afuera del área de los felinos, condujo con buena técnica, se metió por el lado izquierdo y remató, sin embargo, se fue muy cruzado su intento por anotar.
Por más ímpetu que mostraron los dirigidos por Robert Dante Siboldi, no les fue fácil descifrar la forma de hacerle daño al conjunto dirigido por Ricardo Ferretti, quien acomodó a sus jugadores para tener mayor control defensivo y mantener su ventaja.
Sin embargo, al minuto 91 apareció Igor Lichnovsky, quien el área de Tigres remató el balón con un gran giro de cabeza, para darle la dirección correcta y vencer al Nahuel Guzmán y poner el 1-1 para enviar el partido a la definición por penales.
Al final Andrés Gudiño, guardameta celeste que entró de cambio, fue figura en la serie desde los once pasos, atajando dos penaltis, que fueron vitales en la victoria de su equipo para meterse a la final del torneo.
