Ciudad de México.- De cara a la Semana Santa, las ganas de salir de vacaciones se imponen sobre la inflación.
Así lo revela la Encuesta Nacional sobre Confianza del Consumidor (Enco), que recaban de manera conjunta el Inegi y Banxico en 32 ciudades del país.
El indicador que mide la confianza de los mexicanos sobre sus posibilidades económicas para salir de vacaciones en los próximos 12 meses llegó a 33.3 puntos durante febrero.
Se trata del cuarto mes consecutivo de avances, así como su nivel más alto en casi cuatro años, desde mayo de 2019, cuando el índice fue de 33.5 unidades y todavía no se declaraba la pandemia de Covid-19.
“Están cayendo más reservaciones por el Tianguis Turístico, Semana Santa y Pascua; tenemos números que no veíamos desde hace rato. Vienen semanas bien encarriladas en turismo”, comentó Rafael García González, presidente de la Asociación de Hoteles de la Ciudad de México.
En entrevista con EL UNIVERSAL, se dijo optimista sobre la ocupación que habrá durante las siguientes semanas.
Desde su punto de vista, el aumento al salario mínimo y la reforma que amplió los días de vacaciones para los trabajadores formales a partir de este año, van a permitir gastar más dinero en los destinos.
En la primera semana de abril, cuando se celebra Semana Santa, la derrama económica será mayor que en 2019, porque la gente tiene ganas de salir de vacaciones después del desánimo que provocó la pandemia, dijo.
En opinión de Rafael García, los hoteles de la Ciudad de México tendrán una ocupación promedio de 65% en Semana Santa, aunque en el Centro, Zona Rosa y Reforma puede llegar a 80%.
El presidente de la agencia Viajes Bojórquez, Armando Bojórquez, coincidió: “La gente está deseosa de vacaciones y le va a importar poco la inflación. Aquí los más beneficiados van a ser los bancos y las casas de empeño”.
El año pasado se calculó que Semana Santa dejó una derrama económica de 96 mil millones de pesos en los destinos turísticos nacionales, pero ahora puede llegar a un máximo histórico de más de 120 mil millones, en parte, por los mayores costos asociados con la inflación, estimó el también presidente de la Asociación para la Cultura y el Turismo en América Latina (Actual).
Armando Bojórquez también detectó mayores reservaciones de viaje en vísperas de esta temporada vacacional.
“Los mexicanos están usando mucho las tarjetas de crédito y algunos están dispuestos a sacrificar bienes materiales mediante el empeño, con tal de salir de vacaciones”, comentó a este diario.
Carestía récord
Mientras la inflación general fue de 7.1% durante la primera mitad de marzo, las cuotas de autopistas subieron en promedio 9% a escala nacional y se trata de la mayor alza en más de cuatro años, desde inicios de 2019.
La Secretaría de Turismo (Sectur) reporta que las carreteras del país son el principal medio de transporte de los viajeros mexicanos. Sin embargo, la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT) informó que el costo de las tarifas en la Red de Autopistas de Cuota Federal subió 7.8% a partir del 7 de febrero pasado debido a la inflación.
También dio a conocer un incremento en las tarifas correspondientes a la red de autopistas concesionada al Fonadin y Capufe desde el 1 de marzo.
No sólo los peajes aumentaron a mayor ritmo que la inflación, sino todos los servicios turísticos que vigila el Inegi.
En particular, las tarifas de hotel aumentaron 11.3% en la primera mitad de marzo y el servicio de autobús foráneo se incrementó 8.7%.
El precio de los boletos de avión se elevó 8.2% y los paquetes turísticos subieron 7.5%.
El año pasado, Puerto Vallarta, Los Cabos y Cancún fueron los destinos donde se observó mayor ocupación hotelera durante Semana Santa, con tasas cercanas a 80%, de acuerdo con la dependencia que encabeza Miguel Torruco.