Ciudad de México.- El caos y la desesperación en la frontera de México con Estados Unidos se hizo presente en el último día de operación del Título 42 y con la llegada, en los primeros minutos de hoy del llamado Título 8, que representa más restricciones para los migrantes en su intento de llegar al vecino del norte.
Ante la desesperación y poco número de agentes de migración de México, ayer jueves cientos de migrantes volvieron a cruzar el río Bravo de manera masiva para entregarse a las autoridades estadunidenses en los límites de Matamoros con Brownsville con la esperanza de tener la oportunidad de una audiencia de asilo humanitario.
El que se cruza que se cruza aunque esté diciendo que es ilegal”, dijo el migrante hondureño Félix González.
De momento se desconoce cuántos migrantes se movilizaron, pero un funcionario federal estadunidense reportó que los encuentros diarios alcanzaron los 10 mil el martes, casi el doble que el nivel de marzo y apenas por debajo de los 11 mil que las autoridades han dicho que es el límite máximo que prevén con el findel Título 42.
Nuestros autobuses están llenos. Nuestros aviones están llenos”, dijo Pedro Cardenas, comisionado de la ciudad de Brownsville, Texas, limítrofe con Matamoros, México.
En Ciudad Juárez, cientos de migrantes entraron en caos y empezaron a abandonar albergues y sus casas de campañas en Ciudad Juárez, para entregarse a la Patrulla Fronteriza y la Guardia Nacional de Estados Unidos, antes de que concluyera el Título 42, e inicie el 8, que implica deportación exprés, sanciones por 5 años, incluso procesos penales y un largo periodo para recibir asilo.
Los migrantes se apostaron en la puerta 42 y anoche estaban a la espera del fin del Título 42 para determinar si se entregaban o no a la Patrulla.
Según la Patrulla Fronterizam tan sólo en Juárez fueron detenidos 2 mil 500 migrantes en las últimas 48 horas.
DESIERTO
En Arizona, horas antes del fin del Título 42, migrantes se reunieron en ambos lados de la frontera con México y algunos se apresuraron a cruzar.
La Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza ha estado en los últimos días reteniendo hasta 28 mil migrantes en sus instalaciones, mucho más de su capacidad declarada y en lo que parecía ser un récord, dijeron dos funcionarios federales que solicitaron el anonimato y el sindicato de la Patrulla Fronteriza.
Los centros de detención fronterizos más concurridos se encuentran en el Valle del Río Grande en Texas y dos áreas en Arizona, según el presidente del sindicato, Brandon Judd.
Judd informó que, debido al volumen de personas que llegan, los agentes están liberando a algunos inmigrantes sin previo aviso para que se presenten en la corte de inmigración, donde pueden entregar una solicitud de asilo y les estándiciendo que se presenten en una oficina de inmigración más tarde.
Algunos migrantes que alcanzaron a llegar al sur de Texas dijeron que ni 24 horas duraron en las estancias estadunidenses, porque hubo deportación exprés.
PIEDRAS NEGRAS
Una vez concluido el Título 42, decenas de migrantes llegaron a Piedras Negras, Coahuila para intentar cruzar el río Bravo.
Las autoridades reforzaron la vigilancia en la frontera y ya iniciaron a partir de ayer con la deportación expedita.
Pese a ello, hay quienes están decididos a correr suerte, tal es el caso de Juan Pablo Guillen: “Para serle sincero, la verdad, desde que entramos a lo que fue Chiapas nos la vimos muy duro; pedimos lo que fue refugio, entonces desde ahí al proceso lo que fue mi esposa hemos venido batallando con retenes de migración.
—¿Piensan cruzar el río Bravo pese a los obstáculos?
—Claro que sí, nosotros nos vamos a tirar, nosotros vamos con Dios y Dios es nuestro guía.
Por su parte Rodolfo Cardona, titular del Sistema de Emergencia de Eagle Pass, mencionó que se tiene reforzada la frontera con Piedras Negras Coahuila; sin embargo, reconoció que ellos no están preparados para lo que se pueda venir, ante el ingreso de miles de migrantes ya que no se tiene la infraestructura adecuada para darles refugio.
SEPARACIONES
Más de mil hombres que acampan entre los muros que dividen a México y a Estados Unidos en Tijuana fueron separados de las familias migrantes cuyas mujeres y niños fueron trasladados por elementos de la Patrulla.
Los hechos tuvieron lugar a la altura del fraccionamiento El Mirador donde los hombres que no están casados legalmente y que son mayores de edad fueron agrupados del resto de las familias migrantes que se encuentran en otro punto de la frontera.
Las personas se encuentran ante la incertidumbre de su situación migratoria por lo que esta ciudad vive una tensa calma.
Los primeros minutos de hoy migrantes seguían cruzando por Matamoros, mientras en Ciudad Juárez y Tijuana se mantenían a la expectativa de movilizaciones.
Hasta el cierre de la edición no hubo algún intento de portazo en los puentes fronterizos para arribar a Estados Unidos.